Autoridades de Protección Civil Nacional mantienen la alerta amarilla en las poblaciones surcadas por el río Orinoco, en los estados Amazonas, Bolívar y Monagas, después del aumento de su nivel en los últimos días como consecuencia de las lluvias y la posibilidad de que suba más este fin de semana por el paso de la onda tropical 16 sobre Venezuela.
De acuerdo a una publicación en Instagram, el organismo estatal resaltó que el nivel en el sector de El Jobal y Caicara en Bolívar llegó 41,95 y 34,32 metros sobre el nivel del mar (msnm), respectivamente, lo que pasa la media de alerta amarilla de 41,50 y 34 msnm respectivamente.
Familias de Amazonas en refugios por riesgo del Orinoco
Las autoridades en Amazonas, que ya habían reportado que las crecidas del Orinoco en Puerto Ayacucho, también se encuentran en alerta amarilla, lo que supone una posible evacuación de la zona.
El gobernador de Amazonas, Miguel Rodríguez, informó que cerca de mil personas han resultado afectadas por las lluvias, por lo que han tenido que trasladarlas a refugios temporales tras la crecida del río Orinoco.
En un contacto telefónico con VTV, Rodríguez confirmó el balance. «Hemos acercado a refugios solidarios a 281 familias. Estamos hablando de casi mil personas», expresó la mañana de este viernes.
El gobernador de Amazonas reveló que la inundación provocada por el río Orinoco es similar a la ocurrida en 2018, una de las más fuertes en la historia de la entidad.
«Hasta ahora, todavía estamos en un metro con 28 centímetros por debajo de esa inundación histórica. Sin embargo, para esta fecha, comparado hoy 11 de julio con la misma fecha de 2018, estamos por encima de esa curva de inundación histórica», alertó.
Atentos en el sur de Monagas
Mientras que el alcalde del municipio Sotillo del estado Monagas, José Maldonado, afirmó que son siete las comunidades que están en peligro, como Apostadero, Barrancos, Sabaneta, Bajo Hondo, Punta de Piedra, Mata de Indios y San Rafael.
En declaraciones a Unión Radio, el alcalde señaló que «La cota de mesura del río, se está hablando que un metro más llegamos a un límite crítico, eso quiere decir que muchas viviendas estarían en peligro de que el río las afecte».
(Con información de Efecto Cocuyo)
Puente en Delta Amacuro ha colapsado tres veces
El puente que conecta a la comunidad rural de Cuya, en el municipio Casacoima del estado Delta Amacuro, volvió a colapsar por tercera vez, dejando incomunicados a más de 60 agricultores que dependen del paso para llevar sus cosechas al mercado. El caso ha encendido las alarmas en la región, pues evidencia fallas recurrentes en las soluciones aplicadas por las autoridades.
Esta estructura ya había sido reconstruida a inicios de 2024 durante la gestión de la exgobernadora Lizeta Hernández, pero cedió nuevamente menos de seis meses después de concluidos los trabajos de rehabilitación.
El colapso más reciente del puente, ocurrido la semana pasada, confirma la fragilidad de la obra y su falta de capacidad para resistir el caudal de agua que atraviesa la zona.
El director estadal de Transporte, Álvaro Cifuentes, acudió al sitio y se reunió con pobladores. Anunció que se reconstruirá el paso en un plazo máximo de 45 días, utilizando un sistema de cuatro tuberías reforzadas y protección de taludes para evitar nuevos daños durante la temporada de lluvias.
Agricultores atrapados por colapso del puente
Mientras llega la solución prometida para el puente, los agricultores de Cuya enfrentan un duro panorama. Muchos de ellos, como Edgar Fortique, han tenido que improvisar pasos de madera por donde solo pueden cruzar motos.
“Desde que se cayó, no hemos podido sacar la yuca ni el maíz. Este es nuestro sustento, y si la yuca se queda mucho tiempo en la tierra, se pudre”, lamentó Fortique, quien vive sin electricidad ni señal telefónica.
Explicó que normalmente vende su producción en San Félix, en el estado Bolívar, pero ahora esa posibilidad está prácticamente bloqueada. “Todo lo que sembramos lo hacemos a pulso, sin crédito ni apoyo técnico. Este colapso nos está afectando directamente en la comida de nuestras familias”, agregó.
Otros pobladores, como Julio Cedeño, resaltan que la situación es crítica para las más de 100 personas que habitan el sector. “¿Cómo sacamos la cosecha si el puente se cayó? No todos tienen moto, y caminar cinco kilómetros cargando sacos de yuca es imposible. Necesitamos una solución que de verdad dure”, afirmó.
La comunidad exige un puente duradero
El nuevo proyecto de reconstrucción fue discutido entre los técnicos del Ministerio de Transporte y los vecinos, representados por el líder comunitario Menencio Contreras. Durante el encuentro, los habitantes expresaron su rechazo a continuar con el modelo de puente tipo alcantarilla, ya que consideran que ha demostrado ser insuficiente para esta zona.
Contreras propuso construir un puente cajón, que ofrezca mayor resistencia a las crecidas del río. “Este puente se ha caído tres veces porque no aguanta la presión del agua. Queremos una estructura que tenga al menos cinco años de vida útil. Lo que se ha hecho hasta ahora no sirve”, sentenció.
Los puentes tipo cajón se construyen con una base más sólida que distribuye mejor la carga y permite el paso del agua con mayor fluidez, algo que los vecinos creen necesario dadas las características del terreno.
El ministerio aseguró que se aplicarán mejoras técnicas
Por su parte, el director Cifuentes explicó que más allá del tipo de puente, el principal error ha sido no haber colocado disipadores de energía, como piedras brutas alrededor de la estructura, que reduzcan la fuerza del agua al impactar.
“El problema es que, sin protección lateral, el agua termina erosionando la base, sea puente cajón o alcantarillado. Por eso ahora propondremos instalar cuatro tubos de 72 pulgadas y reforzar con piedras el paso. Así podemos garantizar una vida útil mucho más prolongada”, explicó el funcionario y resaltó que se espera concluir la rehabilitación en mes y medio.
Además, pidió a la comunidad sumarse al proceso de reconstrucción: apoyar en la recolección de materiales naturales como piedras y colaborar con los técnicos para medir los niveles del río.
(Con información de Radio Fe y Alegría)