El próximo secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), el surinamés Albert Ramdin, anunció este lunes que ordenará una evaluación legal sobre la membresía de Venezuela en la organización.
"Lo primero que pediré es una opinión legal sobre el estatus de Venezuela en esta organización y no quiero un consejo unilateral, lo quiero de diferentes lados para poder entender realmente cómo abordamos el asunto", explicó en una rueda de prensa tras ser elegido secretario general.
En 2017, el gobierno de Nicolás Maduro denunció la Carta de la OEA para retirarse formalmente del foro regional, un proceso que dura dos años, pero en 2019 el organismo reconoció al opositor Juan Guaidó como presidente interino del país y este retiró la denuncia. Actualmente, el asiento de Venezuela en la OEA está desocupado.
OEA evaluará el estatus legal de Venezuela
"El tema de Venezuela en esta institución hay que mirarlo bien. Las personas que actualmente están en el poder en Venezuela, si no se les quiere llamar gobierno, dicen que no son miembros. Otros dicen que Venezuela sigue siendo miembro", explicó Ramdin.
Así mismo, el surinamés, que en mayo sucederá al uruguayo Luis Almagro al frente de la OEA, reiteró que está a favor del diálogo con el gobierno de Maduro, quien asumió un nuevo mandato a pesar de las denuncias de fraude electoral de la oposición, que revindica la victoria de Edmundo González Urrutia.
"Para resolver los problemas es necesario dialogar. Si te excluyes de esa oportunidad, cierras la puerta a la influencia y la búsqueda de soluciones", declaró el próximo secretario general, quien cree que se debe ser "neutral" y no "tomar partido por uno de los lados".
Ramdin explicó además que "en todos los países y no solo Venezuela" debe haber elecciones pacíficas, en las que todos puedan participar y que se respeten los resultados.
En otros asuntos, el sucesor de Luis Almagro reveló que ha mantenido contactos con Estados Unidos, el principal donante económico de la OEA, para que mantenga la financiación del organismo.
Ante el desinterés de la Administración de Donald Trump por los organismos multilaterales, el plan de Ramdin es demostrar a Estados Unidos que los recursos que aporta al organismo "también sirven a sus intereses".
Preguntado por Nicaragua, que abandonó formalmente la OEA en 2023, el canciller surinamés dijo que no será una "prioridad inmediata" abordar la situación de ese país porque ya no forma parte de la organización.
Larga carrera diplomática: ¿Quién es Albert Ramdin?
El ministro de Relaciones Exteriores de Surinam, Albert Ramdin, se convirtió este lunes en el primer caribeño en ser elegido como secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA). Sucederá el próximo mayo al uruguayo Luis Almagro.
La candidatura de Ramdin, de 67 años, fue impulsada sobre todo por los países del Caribe. También por los gobiernos progresistas de la región, como Brasil, Bolivia, Chile, Colombia, México y Uruguay.
El surinamés, que fue elegido por aclamación durante una sesión del Consejo Permanente de la OEA, en Washington, era el único aspirante en la contienda. Su rival, el canciller paraguayo, Rubén Ramírez Lezcano, afín a Donald Trump, retiró su candidatura por falta de apoyos.
Postura sobre Venezuela y China
El día que presentó su candidatura, Ramdin declaró que "la única forma" de tratar la crisis en Venezuela es mediante un "diálogo". Lo hará con el gobierno de Nicolás Maduro, quien fue investido por un nuevo mandato a pesar de las denuncias de fraude electoral de la oposición, que defende la victoria de Edmundo González Urrutia.
De hecho, el pasado mes de febrero, el canciller surinamés recibió a su homólogo venezolano, Yván Gil, para "estrechar lazos".
En cambio, su rival, Ramírez Lezcano, defendía que la OEA debía trabajar intensamente para que Venezuela, Cuba y Nicaragua vuelvan al sistema democrático. "Que tengan gobiernos respetados y respetables".
La postura sobre Venezuela, miembro de la OEA, es uno de los temas que más dividen a la organización.
Además, el surinamés se distanciaba de su contrincante en la carrera por la secretaría en cuanto al rol que China debía ocupar en América Latina. Este es un factor que inquieta a Estados Unidos, que es el principal donante económico de la OEA.
Señalado por su afinidad con China, miembro observador de la OEA, Ramdin declaró el día que presentó su investidura que todos los países deben tener la misma oportunidad de poder hablar, influir y contribuir en la organización.
"(El papel de China en la región) es importante. Cada vez es más importante, especialmente en términos de comercio e inversión. También en términos de conexiones diplomáticas", dijo otro día en una entrevista.
La victoria de Ramdin podría suponer un viraje en el discurso de la organización hacia uno no tan alineado con Estados Unidos.
Larga carrera diplomática
La mayoría de países que respaldaron su candidatura pusieron en valor la capacidad de Ramdin para buscar diálogos y consensos dentro de la organización tras diez años de gestión de Almagro, criticado por la izquierda regional por su afinidad con Washington.
Ramdin, diplomático de carrera de Surinam, antigua colonia de Países Bajos, estudió Geografía Social. Ha ocupado diferentes cargos institucionales en organizaciones internacionales como las Naciones Unidas o la propia OEA. En 1997 fue designado representante permanente ante la organización para su país.En 2001, después de pasar por la Comunidad del Caribe (Caircom), fue nombrado asesor del secretario general de la OEA y en 2005, secretario general adjunto, cargo en el que estuvo dos mandatos consecutivos, hasta 2015.
Desde 2020 es ministro de Relaciones Exteriores, Negocios Internacionales y Cooperación Internacional, además de vicepresidente del Consejo de Ministros en el Gobierno del presidente Chan Santokhi.
Según su candidatura, tiene más de 25 años de experiencia en negociación internacional, diplomacia multilateral, asistencia para el desarrollo y ejecución de políticas públicas. Ramdin asumirá el cargo para el periodo 2025-2030, un periodo en el que tendrá que lidiar con la crisis en Venezuela, la situación migratoria regional y la nueva Administración de Donald Trump, desinteresada de los organismos multilaterales.
(Con informaciones de Efe)