El presidente de EE. UU., Donald Trump, aseguró en una entrevista difundida este martes que los días de Nicolás Maduro en el poder "están contados", aunque optó por no revelar sus planes en torno a ello.
Durante una entrevista con el medio estadounidense Politico, al mandatario se le preguntó qué tan lejos está dispuesto a llegar para ver la salida del líder chavista. A esto, respondió: "No quiero hablar demasiado... pero sus días están contados".
Trump también señaló que podría amplificar las acciones militares en América Latina contra objetivos que, según él, están vinculados al narcotráfico. Además, negó en reiteradas ocasiones a descartar el envío de tropas a Venezuela, como parte de los esfuerzos para forzar la salida de Maduro, a quien responsabiliza del envío de drogas y delincuentes hacia EE. UU.
"No quiero descartar ni que me lo preguntes, no hablo de ello. No quiero hablar contigo sobre estrategia militar", dijo Trump a la entrevistadora.
Pese a lo anterior, afirmó que consideraría usar la fuerza contra objetivos en otros países donde el narcotráfico es muy activo, incluyendo México y Colombia. "Claro que sí", apostilló.
Las palabras de Trump se producen mientras el gobierno venezolano acusa a Washington de "planear acciones militares para controlar sus recursos energéticos". Maduro ha insistido en que la “verdadera motivación” detrás de la presión estadounidense es el petróleo venezolano, afirmación que ha generado amplio debate en la región.
El cierre del espacio aéreo forma parte de una serie de medidas adoptadas por la administración Trump, que en los últimos meses ha intensificado sus declaraciones contra el gobierno de Maduro y ha reiterado que “todas las opciones están sobre la mesa”.
Jorge Rodríguez: EE. UU. “respira por la herida” ante la "resistencia de Venezuela"
El presidente de la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez, afirmó este martes que la operación militar estadounidense que se lleva a cabo en el Caribe constituye “una agresión brutal” y que quienes la promueven “respiran por la herida”, tras "no lograr doblegar al pueblo venezolano ni al gobierno bolivariano".
Rodríguez explicó que esta "agresión" no se limita a los últimos cuatro meses, sino que se trata de un "hostigamiento multifactorial que combina el poder económico, militar y mediático para generar una guerra psicológica sin precedentes".
Señaló que las acciones incluyen 962 sanciones impuestas por Estados Unidos y sus aliados europeos, así como el "bloqueo de ingresos que redujo la economía venezolana a apenas el 1% de lo que recibía el país antes".
Asimismo, denunció que el impacto de estas agresiones "afectó programas sociales vitales, como el Programa Simón Bolívar, que cubría tratamientos médicos costosos para niños con enfermedades catastróficas en hospitales de Moscú, Estambul y otros países". Acusó al opositor Juan Guaidó y a sus aliados de "desviar esos recursos, impidiendo que los tratamientos se realizaran".
Asimismo, el dirigente criticó la supuesta lucha anti drogas estadounidense, calificándola de “hipocresía pura”, y recordó que las ganancias de la venta de drogas, que alcanzaron billones de dólares, engordan las arcas de políticos y supremacistas blancos en Estados Unidos y en paraísos fiscales internacionales.
También afirmó que más de 80 personas fueron asesinadas en los últimos cuatro meses, "sin que mediara acción judicial alguna, y responsabilizó a EE. UU. de fomentar la violencia y la desestabilización".
Rodríguez enfatizó que Venezuela es un país de paz, pero advirtió que no tolerará agresiones contra su soberanía: “Tengan la absoluta certeza de que vamos a luchar. No tenemos otra cosa que dar, aunque sea nuestra propia vida, para defender el territorio sagrado de Venezuela”. Recalcó que incluso quienes no comulgan con el chavismo están unidos frente a esta amenaza, defendiendo la tierra de los antepasados y el futuro de los hijos del país.
Finalmente, destacó la resiliencia del pueblo venezolano "frente a las campañas de calumnia y la presión internacional", asegurando que la Revolución bolivariana "continúa consolidando la paz, la dignidad y los derechos de los trabajadores, los pueblos indígenas y las comunidades originarias".
(Con informaciones de El Cooperante)

